Este 1 de diciembre el gobernador de Nuevo León, Samuel García, causó polémica por sus declaraciones en relación a la aprobación en primera vuelta de la reforma por la cual debe pedir autorización al Congreso estatal para salir de México.
El mandatario neoleonés se limitó a decir “No son mis papás, yo no le pido permiso a nadie”, durante un breve encuentro con la prensa local.
García hizo esta declaración luego de que el 30 de noviembre el Congreso de Nuevo León aprobó en primera vuelta una reforma al Artículo 120 de la Constitución Política del Estado, por la cual el gobernador “no puede ausentarse del Estado por más de treinta días naturales sin autorización del Congreso del Estado o, en su caso, de la Diputación Permanente”, según fue señalado en un comunicado.
Una segunda modificación en materia de licencias del ejecutivo plantea que cuando el gobernador salga de la República Mexicana por un periodo superior a tres días y menor a 30 tendrá que avisar al Congreso o a la diputación permanente.
“Tratándose de viajes oficiales, deberá acompañar a su solicitud la agenda de trabajo, así como presentar a su regreso un informe de los resultados obtenidos en sus gestiones”, añadió Eduardo Leal, diputado local.
El reciente comentario de García reavivó su disputa con los congresistas locales, la cual comenzó con el proceso de elección del nuevo titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), cuando fue vetado el aspirante Adrián de la Garza, ex aspirante por el PRI a la gubernatura.
En medio de las diferencias entre el gobernador y los legisladores, éstos reactivaron una denuncia que busca su sometimiento a un juicio político y modificaciones a la Ley de Participación Ciudadana para lograr una consulta popular de revocación de mandato.
Específicamente el Partido Acción Nacional (PAN) atraerá una solicitud de un ciudadano, derivada de la alteración de escudo de armas de la entidad. Y es que desde octubre del 2021, fue revocado el lema en latín Semper Ascendends (Siempre ascendiendo) y sustituido por la frase El Gobierno del Nuevo Nuevo León.
La bancada albiazul busca también la modificación de artículos transitorios de la reforma aprobada en el 2021 para que se haga una consulta popular en el 2025, y así los neoleoneses puedan decidir si Samuel García termina su mandato o se retira antes de lo previsto.
García aseguró que la ofensiva en su contra es una forma de presionar para imponer a un fiscal que favorezca sus intereses. En ese sentido expresó: “Hoy el Congreso está enojado porque me quiere imponer al fiscal de la vieja política, ¡a mi rival de fiscal!”.
Cabe señalar que Adrián de la Garza, a quien el gobernador vetó, fue su contrincante durante el proceso electoral en que resultó triunfador. García lo acusó de recurrir al abuso de autoridad, espionaje, filtraciones y mentiras en un intento por ganar la gubernatura.
Fue en ese sentido que entre sus argumentos para no incluirlo en la terna final que será votada en el Congreso está el de que es “capaz de utilizar las instituciones y torcer la ley para sus propios intereses”, lo cual pondría en riesgo la seguridad e impartición de justicia en Nuevo León.
En contraparte el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha acusado a García de recurrir al chantaje para lograr que sea elegido un “fiscal carnal” que convenga a sus intereses.
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