Mujer de Monterrey visita Hello Kitty Burgerland y sale decepcionada

Una mujer de Monterrey se levantó a las 4:00 de la mañana para reservar su lugar y poder acudir al famoso restaurante Hello Kitty Burgerland, sin embargo, al contar su experiencia señaló que “no volvería a ir”.

A través de redes sociales la usuaria Brenda Rodríguez publicó un video, donde se puede ver en la entrada a varias personas esperando su turno, la mayoría en parejas.

Hay que considerar que la joven reveló que tuvo que levantarse desde muy temprano para poder alcanzar el lugar número mil 400 y llegar a las 4:00 de la tarde al restaurante.

Las primeras impresiones fue que, al entrar al negocio, Brenda muestra algunas prendas como sudaderas, las cuales tenían un costo de mil 650 pesos y una blusa que le gustó a su hija por 850 pesos.

“Te voy a platicar mi experiencia, me levanté desde las cuatro de la mañana para alcanzar lugar, fui el número mil 400, hay varias prendas de ropa, como blusas y sudaderas, a mi hija le gustó esta playera por 850 pesos”.
A su vez, de acuerdo con Brenda, hay una Barbie en un mostrador que está a la venta por alrededor de 3 mil pesos.

De golosinas puedes comprar 100 gramos de dulces a 99 pesos o también galletas en forma de Hello Kitty y moños en color rojo, así como de otros diferentes personajes.

Por qué ya no visitará el famoso restaurante Hello Kitty Burgerland en Monterrey

Brenda mostró parte de las instalaciones y aseguró que “son muy bonitas”, sin embargo, aseguró que no volvería al lugar, puesto que la comida no era muy buena, incluso, algunos usuarios que ya fueron al lugar apoyaron el comentario de la joven.

La regiomontana aseguró que gastó 700 pesos entre ella y su hija, donde compraron combos con hamburguesa y papas.

“Si eres fanático ve, está muy bonito, pero es muy caro la verdad, algo exagerado, sobre las hamburguesas, están equis, no volvería a ir”.
“Me llevaron la comida y estaba fría, la regresé y volvió a estar fría, la merch muy cara, está bien ir una vez y ya”, dijo un usuario.
No solo fue la comida, Brenda aseguró que una blusa del lugar que costaba 850 pesos, la vio idéntica en la tienda Ross de Estados Unidos por un precio de 100 pesos mexicanos.

Pese a ello, el restaurante sigue siendo visitado con miles de lugares en espera al momento de reservar.

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