Se dice que el edificio más alto de América Latina es la Torre Obispado de Monterrey, un complejo de dos rascacielos, uno de ellos de 64 niveles y 305 metros de altura, convirtiéndolo en el más grande de América Latina.
En segundo lugar, se encuentra la Costanera Center en Chile, también conocida como Costanera Center Torre. También tiene 64 pisos y una altura de 300 metros. En tercer lugar, se encuentra el One Tower al sur de Brasil. Terminado en diciembre de 2022, es el edificio más alto jamás construido en el país y el segundo rascacielos más alto de América del Sur, con 290 metros de altura.
Pero ahora Monterrey tendrá otro hito para presumir, ya que contará con la torre más alta de México y de toda Latinoamérica, que además será la segunda más alta de todo el continente, al superar a todos los rascacielos neoyorquino, a excepción del Freedom Tower.
Se trata de la Torre Rise que tendrá 475 metros de altura, prácticamente duplicará la altura de la torre más alta de la CDMX, que es la Torre Reforma, la cual mide 246 metros, y también superará a edificios icónicos como las Petronas de Malasia, de 427 metros, o el Central Park de Nueva York, de 432 metros.
Dentro de la presentación del Programa Cívico-Cultural de la Conmemoración de los 200 años de Nuevo León, se mostró el proyecto del Mirador de la Torre Rise, que contará con 3 niveles y atraerá el turismo a nivel internacional. Lo que se proyecta que esta torre, que estará ubicada en el municipio de Monterrey, estará terminada a mediados del 2026.
Esta Torre es un proyecto de Ancore Group, y sus 475 metros de altura la harán la número 1 de altura en Latinoamérica, la número 2 en el continente, y la número 13 en el mundo. Será una torre de usos mixtos y albergará espacios para la innovación, la educación, el arte, la cultura y el entretenimiento.
Así que en el futuro, después de la Torre Rise, en el ranking quedarán colocadas en segunda lugar la Torre Obispado, la Gran Torre Santiago y en cuarto y quinto sitio los rascacielos JW Marriot y Torre Vitri, localizados ambos en Panamá y con una altura de 284 y 275 metros, respectivamente.
La Torre Rise será el edificio más alto de América Latina, pero también se espera lograr un ahorro significativo de energía y agua, así como la reducción de emisiones y residuos contaminantes; pues los desarrolladores de la Torre buscan cumplir con todos los objetivos ambientales para acreditar la mayor cantidad de certificaciones verdes en el país, entre ellas el sistema LEED, Green Globes Initiative, Well y El Building Efficiency Quotient, entre otros.
Tal es el caso de la Green Globes Initiative (GBI) cuyos objetivos ambientales van dirigidos a disminuir el uso de energía y agua, así como la reducción de emisiones y residuos. De lograrlo se trataría de la primera certificación entregada a un proyecto fuera de Estados Unidos y Canadá.
También, el sistema de certificación de edificios sostenibles más reconocido a nivel mundial es la certificación LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental), la cual garantiza un ahorro significativo de emisiones de gases de efecto invernadero, energía y consumo de agua.
Otras certificaciones que se busca avalen la sostenibilidad de la obra son el Well, una certificación que posiciona el diseño y la operación de edificios como agentes de salud pública al verificar el impacto de elementos como el sonido y el confort térmico que aportan a la construcción.
El Building Efficiency Quotient (BEQ), encargado de evaluar la eficacia del consumo y características energéticas del edificio, de conseguir esta certificación será de los pocos edificios acreditados en México, así como el más grande en dimensión y altura. Como punto de arranque para obtener estas certificaciones en materia ambiental, en la obra se utiliza un concreto especializado de alta resistencia de Cemex, el cual tiene bajo contenido de carbono y es producido en su totalidad con agua no potable.
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